Y llegó el ansiado momento de tomar un respiro. Después de un año particularmente complicado, llego -como suele ser habitual- exhausto a las vacaciones. Echando una ojeada al calendario, imagino un mes de agosto ajetreado, con pocos momentos para el asueto, pero con un enriquecedor cambio de actividad, que me mantendrá más lejos que de costumbre del ruidoso mundo de la Red. Me voy, pero Sala de lectura queda a tu disposición, para que -si te apetece- leas o repases alguno de los 385 artículos o los más de 1.600 comentarios que componen, de momento, su portafolio.

No quiero apagar el ordenador sin celebrar contigo, el cuarto aniversario de un blog que nació en un ya lejano mes de agosto de 2009. Mucho ha llovido desde entonces y muchas son las cosas que aún nos quedan por leer y comentar juntos. Reiniciaré la andadura en septiembre, con el objetivo de reflotar El Rincón de Sísifo adaptándolo a los nuevos tiempos. Para el blog, comienza el quinto año de un proyecto que ha pasado por las vicisitudes personales y profesionales de su autor, pero que no ha perdido en este tiempo la frescura y el entusiasmo de las cosas que se hacen de forma libre y altruista.

Gracias a todos por vuestra participación, vuestro apoyo y por contribuir a mejorar a través de múltiples canales este blog. Gracias en particular a #mirrubita por hacerme creer que, como decía Hesse, para que pueda surgir lo posible es preciso intentar una y otra vez lo imposible.