Feliz 2.012

Acaba –por fin, dirán algunos- 2.011, un año que ha sido particularmente denso. No. No vamos a recapitular. Ya hemos visto infinidad de blogs que hacen interesantes resúmenes de todo lo que ha acontecido el año que ahora acaba. Pero sí queríamos compartir contigo una reflexión: es en tiempos de crisis, cuando damos lo mejor de nosotros mismos. 2.011 ha sido el año del . Hemos pedido y se nos ha solicitado colaborar en proyectos altruistas cuyo fin era mejorar, en la medida de nuestras infinitas posibilidades, nuestro trabajo. Y todos se han apuntado a tirar de este pesado carro. De hecho, aún estás a tiempo de participar en la última iniciativa de la que hemos tenido conocimiento. En 2.012, del que se hacen apocalípticos vaticinios seguramente habrá que redoblar esfuerzos por sacar nuestro futuro del inmenso lodazal en el que está metido.

Pero queremos acabar el año con una sonrisa. A los que os acercáis a Sala de lectura en busca de siensia y no de filosofía, os recomendamos la profunda y valiente reflexión de Víctor Montori en el British Medical Journal. Un artículo que da en la línea de flotación de la pseudomedicina basada en pseudoevidencias, dirigida a pseudopacientes, que tan de moda se está poniendo. Quizás sea hora de volver a los orígenes y, como nos recomienda el 16º principio de la prescripción prudente, no dejarnos seducir por los deslumbrantes fuegos de artificio de fármacos que no han demostrado mejorar variables de resultado orientadas al paciente. En el caso de la diabetes, no hacerlo puede traer dolorosas consecuencias.

A los que estáis saturados de tanto artículo, os dejamos una canción de Manolo García. Se titula Estoy alegre y comienza diciendo: un vaso de cerveza en mi mano/y mirarte a los ojos es mi porvenir/un asceta de suburbio pasa tras la cristalera del bar/me sonríe y me saluda/no sé en qué día vivo/no puedo pedir más.

Que tengas una feliz entrada de año. Para 2.012 un solo deseo: el de simplificar nuestras vidas. Como en la Medicina, a veces retorcemos nuestras expectativas hasta hacerlas inalcanzables. Un vaso de cerveza, unos amigos, sin guasap, sin reloj… ¿se puede pedir más?

Un comentario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.